EDITO, Relato Social

Aseres como el Che

Por Félix Antonio Rojas.

Más allá de los tiempos diluvianos y en los albores de la Atlántida, el pleonasmo y la redundancia coincidían con la oración, los mantras, las invocaciones y las letanías,  hasta llegar al principio del siglo pasado, a las consignas y los lemas extremistas del comunismo bolchevique. Donde se alababa, se glorificaba y llamaban a imitar a sus criminales más ilustres.

Cuba no fue una excepción, entre tanta propaganda, slogan y apología a la violencia, a partir del fatídico  1959 al sumir a la Isla  en una era dilatada en el tiempo de oscuridad y crueldad física e ideológica, por parte de una familia de delincuentes granjeros y su banda de cuatreros o rebeldes adoctrinados.

Esa banda de cuatreros adoctrinados bajo las ordenes  de la familia de granjeros delincuentes se dieron la tarea desde un primer momento, adoctrinar a los pioneritos y obligarlos en imitar todas las formas y métodos violentos revolucionarios para que el hombre nuevo en el futuro fuera lo que hoy en día es: un mojón negro y seco, o una diarrea con patas que balbucea frases incomprensibles y con un nivel de primitivismo y analfabetismo delirantes y de proporciones catastróficas en la cultura y la educación.

Esa radiactividad soviética se mezcló con la toxicidad del asere nacional, creando una fusión entre una Matrioshka  de la FSB y el guapo o el presidiario del barrio. ¿El resultado? Un mongofiera internacionalista mercenario o un mercenario proletario, o un regguetonero iletrado de polvareda por la nariz y broncas en antros de nostálgicos, mientras pasea sus cadenas de oro por Miami, o formando parte del ejército rojo en la invasión a Ucrania. Ese mismo ejército que estuvo invadiendo a Cuba por más de 30 años.

Al final de tanto repetir la consigna se convirtieron en el Che, aquel argentino que decía: que a los negros no les gustaba trabajar y que se gastaban el dinero en bebidas alcohólicas y eran muy dados a la fiestas y a los momentos lúdicos.

Ahí tienen, Aseres como el Che en Ucrania, o aseres tóxicos como Chocolate en Miami.

Félix Antonio Rojas es friki freelancer.

2 Comments

  1. luis Antionio mac-Beath (Luant)

    Genial. Eso de Aseres como el Che es una de las mejores caricaturas escritas que he visto. ¡Bravo!

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