Por Carlos Rioba/La Gaceta de la Iberosfera.
El Tribunal Supremo ha adoptado una postura firme respecto a la fuga de Carles Puigdemont y no pretende exonerar al Gobierno, específicamente al Ministerio del Interior liderado por Fernando Grande-Marlaska, de su responsabilidad. El juez Pablo Llarena ha manifestado su descontento con el ministro y está exigiendo explicaciones por lo ocurrido.
El juez Llarena ha dejado claro que no se puede culpar exclusivamente a los Mossos d’Esquadra por el escape de Puigdemont. En una de sus providencias, detalla El Confidencial, Llarena se dirige directamente a Grande-Marlaska, expresando su sorpresa ante el hecho de que Puigdemont pudo llevar a cabo un acto público cerca del Parlamento de Catalunya y luego escapar, a pesar de la orden de detención en su contra. Llarena ha pedido detalles sobre el operativo inicialmente planificado para capturar al expresidente y quiere entender qué fallos técnicos permitieron su fuga.
Por su parte, el Ministerio del Interior ha mantenido una posición defensiva, señalando a los Mossos como los responsables del operativo de detención. Sin embargo, no había ninguna restricción que impidiera a la Policía Nacional o a la Guardia Civil intervenir. La policía autonómica catalana, a pesar de sus amplias competencias, no colaboró con las fuerzas de seguridad del Estado en este caso…