Por Elena Salvoni y Brittany Chain para Daily Mail/DailyMail.
Israel ha bombardeado las instalaciones nucleares de Irán y asesinado a importantes funcionarios militares en una devastadora ola de ataques aéreos, aumentando los temores de que Oriente Medio esté al borde de una guerra total.
Las explosiones resonaron en todo Teherán mientras se producían simultáneamente ataques a instalaciones nucleares y a las casas de altos comandantes y asesores militares, con imágenes que mostraban cómo los drones atravesaban las paredes de edificios de gran altura.
Benjamin Netanyahu dijo que la Operación León Ascendente, que implicó un bombardeo de drones cargados de explosivos y más de 200 aviones israelíes , tuvo como objetivo una instalación nuclear iraní en Natanz y el programa de misiles balísticos del país.
Washington se distanció de los ataques y advirtió a Irán que no ataque las bases estadounidenses en la región en represalia, mientras que Teherán advirtió que Estados Unidos pagaría «un alto precio» junto con Israel.
Irán ha prometido aplicar una «amarga venganza» tras los ataques, que también afectaron lugares de la capital, Teherán, y el líder supremo, el ayatolá Ali Khamenei, advirtió que Israel se enfrentará a un «castigo severo».
Entre los líderes militares muertos en los ataques se encontraba el comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, Hossein Salami, y los medios estatales confirmaron también la muerte de seis destacados científicos nucleares.
Preparándose para las represalias, el ejército de Israel advirtió el viernes por la mañana que más de 100 drones iraníes habían sido lanzados contra el país y dijo que estaba trabajando para interceptarlo.
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