EDITO

El Grupo de Puebla al rescate

Por Minervo L. Chil Siret.
El comunicado conjunto emitido por los gobiernos de Brasil, Colombia y México sobre las elecciones presidenciales venezolanas muestra claramente la estrategia del Grupo de Puebla (y por extensión del Foro de Sao Paulo) para intentar defender lo indefendible.
Estos gobiernos son los mismos que evitaron, al negarse a firmarla, una declaración de la Organización de Estados Americanos que únicamente pedía que se presentaran las actas que avalaban el resultado de la elección presidencial del pasado 28 de julio, algo que ni el Consejo Nacional Electoral ni la dirigencia chavista han presentado, a diferencia de la coalición opositora que promovía la candidatura de Edmundo González que sí ha publicado en un sitio web más del 80% de estas actas.
Estos líderes del Grupo de Puebla salen así al rescate de la narcodictadura venezolana, a la que claramente respaldan de manera implícita y solapada con este comunicado.
Los gobernantes de Brasil, Colombia y México buscan no solo comprarle tiempo a Nicolás Maduro sino además diluir la responsabilidad del régimen chavista con la represión desatada, intentando hacer responsables (o al menos co-responsables) de la violencia a las fuerzas opositoras.
Pero sobre todo, buscan rebajar la gravedad de lo acontecido, que más que un acto de fraude es un verdadero golpe de estado electoral, en el que están coludidos tanto el ejecutivo, el legislativo, el Consejo Nacional Electoral, el Tribunal Supremo de Justicia, el ejército y las fuerzas policiales y de seguridad, que buscan desconocer y violentar la victoria de la oposición democrática en la elección presidencial.
Estos líderes del Grupo de Puebla intentan reducir el problema a una simple disputa por el conteo de los votos, algo que según ellos es normal en una democracia, y que puede y debe dirimirse en las instituciones.
¿Cuál instituciones? ¿El CNE que anunció, sin ninguna evidencia que lo respaldara, el supuesto triunfo del dictador? ¿O el TSJ que convalidó la inhabilitación de María Corina Machado para que no pudiera presentarse como candidata en la contienda electoral?
Los objetivos del comunicado conjunto están más que claros. Intentar mantener en el poder a Maduro y los capos del Cartel de los Soles; tratar de rescatar la legitimidad de las desprestigiadas instituciones de la narcodictadura; culpar a la dirigencia opositora de no acatar y respetar el resultado de la contienda electoral; justificar la represión como acciones de salvaguarda del orden y la paz social; y evitar que se investiguen las denuncias de participación en la represión a los ciudadanos venezolanos de tropas de mercenarios extranjeros, principalmente las enviadas por la dictadura totalitaria cubana.
El pueblo y la oposición democrática de Venezuela, así como la comunidad internacional comprometida con la democracia y el respeto a los derechos humanos, no deben caer en el juego del Grupo de Puebla impulsado desde los gobiernos de Brasil, Colombia y México.
La única solución justa, legítima y ética es reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela, exigirle a Maduro y sus secuaces que acepten la voluntad soberana del pueblo venezolano, expresada clara e inequívocamente en la urnas, y que entreguen el poder a quienes verdaderamente triunfaron en los comicios.
Cualquier otra cosa sería un acto de abandono y traición al pueblo venezolano, y de complicidad con la narcodictadura, que sentaría un precedente de impunidad que envalentonaría a otras dictaduras y a otros aspirantes a dictadores.
Minervo L. Chil Siret
Miembro del Secretariado Ejecutivo del Movimiento Cristiano Liberación.
Compartir

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*