Por Félix Antonio Rojas.
El viejo chaman repetía su mantra mágico a las orillas del Thompson River, mirando desde el nirvana la bóveda celeste que danzaba sobre su penacho. Sintió por primera vez aquella fuerza divina que se comunicaba astralmente con él, a través del ritual de las piedras incandescentes y el poder de la visión remota que había heredado de los otros brujos de la tribu que lo antecedieron en el tiempo. Un nuevo Dios esplendoroso y lumínico se le aparecía en sus visiones y se comunicaba como un maestro de lo desconocido e inexplorado, para luego manifestarse días después, descendiendo del cielo en un carro de fuego plateado y majestuoso.
Como un padre sagrado, comenzó a enseñarle a sus nuevos hijos, los pacíficos Tkémlúps te Secwepemc el conocimiento cósmicos y espiritual que rigen en este cuadrante físico del universo. Sus conocimientos se mantendrían vigentes y pasarían de generación en generación por las tradiciones orales que se arraigarían en la conciencia de sus discípulos…al final fugazmente, Él, se alejaría a su sistema planetario de Tipo 3, para volver algún día al reencuentro de sus amados Tkémlúps te Secwepemc.
Y en esa espera interminable de Dios, llegaron los ‘científicos’…
Debajo de los sótanos de La Kamloops Indian Residential School, internado establecido a fines del siglo XIX para integrar a los pueblos indígenas a la nueva sociedad canadiense, en la provincia de la Columbia Británica, miembros de de la tribu Tkémlúps te Secwepemc, la semana pasada en excavaciones por sospechas y denuncias desde siglos, han hallado los restos de 215 cadáveres de niños internados asesinados por parte de la facción oscura de la iglesia católica desde 1890 a 1969.
Otras 751 tumbas sin nombres fueron encontradas en los terrenos donde se encontraba en el pasado la Escuela Residencial Indígena Marieval, un antiguo internado dirigido por otra parte de las facciones oscuras y diabólicas de la iglesia católica de la provincia de Saskatchewan, donde eran recluido niños y niñas de la Primera Nación Cowessess.
El descubrimiento de cientos de cadáveres de niños indígenas en Brandon, Cowessess y Kamloops, ha sacado a la luz el genocidio sistemático cometido en el pasado y las aberraciones más condenables de los colonos, que infligieron a sus víctimas y las familias de las comunidades originarias a través del entramado de escuelas residenciales indígenas impuestas por el gobierno canadiense.
Entre los años 1942 y 1952 los científicos más prominentes en nutrición de Canadá utilizando técnicas Estalinistas, llevaron acabo investigaciones y tratamientos pocos éticos a más de 1300 indígenas incluyendo 1000 niños en comunidades al norte de Manitoba.
Hasta ese momento los experimentos se realizan con animales y otras especies, hasta que Lionel Bradley Pett, quien fue el padre de la Guía de Alimentos Canadienses, imitando las prácticas de la KGB y del comunismo soviético y chino, utilizó a los niños indígenas como animales de laboratorio.
Los principales criminales del experimento de desnutrición para que los pueblos indígenas fueran activamente más rentables, fueron, Lionel Bradley Pett, Frederick Tisball y Percy Moore, argumentando que si los pueblos nativos fueran más sanos, transmitirían menos enfermedades a los nuevos colonos.
Los experimentos consistían en privar gradualmente de calorías y de nutrientes necesarios para el crecimiento de los menores, así como negarle el suministro de minerales, vitaminas esenciales y la anulación de atención dental de ningún tipo. Lo otro aberrante de este drama era que los niños antes de ser utilizados como conejillos de india, pasaban largos periodos de hambruna hasta llevarlos a la desnutrición, posteriormente eran trasladados a los laboratorios de la muerte.
Desde 1863 hasta el reciente 1998 más de 150.000 niños de los pueblos originarios fueron separados de sus familias y recluidos en internados estatales por todo el territorio (progresistas y pacifico) de Canadá, siendo en la actualidad una de las investigaciones más urgente que tiene el gobierno de Justin Trudeau, otro miembro de la Élite Corporativa de las Tinieblas, que mueven los hilos de la humanidad.
When the fire comes.
49,5 grados centígrados, la temperatura más alta jamás registrada en Canadá. El record fue localizado en el pequeño pueblo de Lytton en la Columbia Británica, a unos 260 km al noreste de Vancouver… En la noche el apacible pueblo de Lytton era consumido completamente por las llamas, mientras los habitantes del lugar escapan entre el fuego abrazador, en busca de la salvación.
En estos momentos el noroeste de EE.UU y el oeste de Canadá están bajos los efectos de la ola de calor más mortífera y destructiva que ha sufrido esa región del planeta. Los meteorólogos y los científicos que estudian este extraño fenómeno meteorológico, lo atribuyen a un radical aumento de aire caliente estático, incrementado a una alta presión atmosférica, formándose sobre el aérea afectada, un domo de calor permanente que tardara en desaparecer supuestamente de forma escalonada.
Hasta ahora la cifra de fallecidos es de más de 500 personas, en lo que es una de las mayores catástrofes producidas por el clima extremo en el pacifico norte.
En estos momentos el sistema climático se mueve hacia las praderas al este, una gigantesca región que se extiende a lo largo de las provincias de Manitoba, Alberta y Saskatchewan.
Cuentan los Aedos de las primeras naciones, que cuando el hombre muere y es enterrado, el cuerpo es recibido por la madre tierra Estsanatheti como un nuevo hijo que atender y proteger por toda la eternidad, mientras el alma asciende y se eleva al encuentro del padre celestial Tsohanoai…pero si pasado el tiempo el cuerpo es profanado y devuelto a la superficie, Estsanatheti, con un grito estremecedor y devastador que caería sobre los impíos, los evaporaría con su aliento de canícula … y Tsohanoai desde lo alto, lanzara tormentas solares y fuego purificador, quemándolo todo y dejando un mundo inhóspito, sumido en una terrible oscuridad para siempre…
Música de fondo: La Villa Strangiato… Rush.
Félix Antonio Rojas es friki freelancer.
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Esta es una historia conocida por pocos pero que finalmente sale a la luz, y ojalà que este escandalo arrase con la familia Trudeau y el ilegitimo hijito del cenicero Trudocito, porque con los de los siglos pasados se puede solo dar una reparacion pero los del siglo 900 si estan vivos hay que hacer justicia, existirà en Canada una ley de proteccion a los nativos como en USA? uhmmm no creo. Buen articulo
Brujo mayor ,qué tipo de brujerías haces para entrar cada día en mis sueños?,te amo.
Led Zeppelin@
Muy interesate trabajo. Aquí dejó un video relacionado con el tema y que explica el modo en que el gobierno liberal manipula la historia del cementerio: https://www.youtube.com/watch?v=B-6Z_Q_BLC8