Por PERKIN AMALARAJ y MARK NICOL y WILL STEWART, DailyMail.
Vladimir Putin planea seguir luchando en Ucrania y debilitar la posición negociadora de Donald Trump en cualquier acuerdo de paz avivando las tensiones entre Estados Unidos y el resto del mundo, según reveló un documento ruso obtenido por una agencia de inteligencia occidental.
Estados Unidos está actuando actualmente como mediador entre Ucrania y Rusia , y el presidente Trump reveló anoche que enviados estadounidenses estaban en camino a Moscú para presentar un posible plan de alto el fuego al Kremlin.
La propuesta de un alto el fuego de 30 días aún no ha sido aceptada por Moscú, que no ha mostrado señales de ceder en su guerra de tres años en Ucrania, con fuertes bombardeos aéreos en los días transcurridos desde que se anunció el plan.
Putin visitó anoche la región rusa de Kursk por primera vez desde que las fuerzas ucranianas tomaron parte de ella en agosto. El Kremlin anunció esta mañana que la operación para expulsar a las fuerzas de Kiev se encontraba en su fase final.
La rara aparición del dictador ruso con uniforme militar fue vista como una señal de que pretende seguir con la guerra, y hoy Polonia , preocupada por la continua amenaza del Kremlin, reveló que ha pedido a Estados Unidos que instale armas nucleares en su territorio.
Mientras Washington continúa presionando para lograr una tregua, documentos de un influyente grupo de expertos vinculado al Kremlin, obtenidos por el Washington Post , sugieren que Rusia ha estado trabajando para socavar un posible acuerdo de paz desde al menos febrero.
Parece que algunas medidas del documento, supuestamente escrito por un influyente grupo de expertos con sede en Moscú la semana anterior a las conversaciones entre Estados Unidos y Rusia en Arabia Saudita a fines de febrero, ya han informado el pensamiento del estado ruso.
El documento, escrito para el Quinto Servicio del FSB, la división del servicio de seguridad que supervisa las operaciones en Ucrania, describe las formas en que Rusia podría mejorar su posición inflamando las tensiones entre Estados Unidos, China y la UE.
Estados Unidos se ha puesto dos veces del lado de Rusia en las votaciones de la ONU, en un marcado cambio de la política exterior de Washington que ha preocupado a sus aliados.
La primera instancia fue en la Asamblea General, donde se opuso a una resolución elaborada por Europa que condenaba las acciones de Moscú y reafirmaba la integridad territorial de Ucrania.
El segundo fue en el Consejo de Seguridad, donde Estados Unidos redactó y votó una resolución que pedía el fin de la invasión rusa sin criticar a Rusia.
El documento del grupo de expertos pro-Kremlin sostiene que, en este contexto, Rusia debería trabajar para lograr el «desmantelamiento completo» del actual gobierno ucraniano.
Putin ha eludido la cuestión de un alto el fuego antes de las conversaciones con el enviado de Trump, Steve Witkoff (cuyo avión estaba previsto que se dirigiera a Moscú hoy) y en su lugar ha encomendado a sus tropas la tarea de recuperar territorio en Kursk.
Anoche, el ejército ruso dijo que había capturado a cientos de tropas ucranianas que luchaban en la región , donde Ucrania lanzó su contraofensiva sorpresa el verano pasado.
Al hablar durante una reunión con tropas en Kursk, Putin prometió tratar a cientos de soldados ucranianos capturados en Kursk como «terroristas», encarcelándolos potencialmente durante décadas, y no como prisioneros de guerra que puedan ser intercambiados.
Las imágenes muestran a estas tropas humilladas al recibir la orden de repetir como un loro «Viva Rusia», algo ilegal según las reglas de la guerra. También dejó claro su deseo de una zona desmilitarizada en la frontera con Ucrania.
El embajador de Putin en Londres, Andrey Kelin, insistió en que el Kremlin abordará un alto el fuego -que ya había descartado anteriormente- «con mucha cautela».
Putin insistirá en condiciones «amplias y similares a las demandas que había hecho anteriormente a Ucrania, los EE.UU. y la OTAN», pero hasta ahora tales demandas han sido vistas como algo que paraliza a Ucrania y es inaceptable.
En un extraño arrebato desde Moscú, horas después del mayor ataque con drones de la guerra contra la capital ucraniana, Sergei Lavrov dijo: «¿Qué protegerán las fuerzas de paz? ¿Los restos del régimen nazi de Kiev?»…
