Por Rebeca Crespo/La Gaceta de la Iberosfera.
El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, anunció la semana pasada que revertirá parte de las políticas medioambientales que hasta ahora había anunciado su gobierno.
Sunak, que lidera uno de los países hasta ahora más estrictos en la aplicación de restricciones de todo tipo en «defensa del medio ambiente», aseguró el pasado miércoles que entre sus objetivos aún se encuentra alcanzar las cero emisiones netas (el plan denominado Net Zero) en 2050, pero también confirmó que retrasará u olvidará buena parte de las medidas dirigidas a la reducción de emisiones.
Así, el Gobierno británico aplazará cinco años, hasta 2035, la prohibición de venta de vehículos de gasolina y Diesel, dará más tiempo a los británicos para que cambien sus calderas de gasoil por bombas de calor, permitirá nuevas prospecciones de crudo y gas en el mar del norte y eliminará los planes que proponían la introducción de impuestos adicionales a algunos productos como la carne en lo que supuso un giro radical respecto al camino emprendido por Reino Unido en las últimas décadas.
«Ahora tendremos un enfoque más pragmático, proporcionado y realista que alivie las cargas de las familias. Todo ello mientras se redobla la apuesta por las nuevas industrias verdes del futuro. En una democracia, ese es el único camino realista hacia Net Zero. Consentimiento, no imposición. Honestidad, no ofuscación. Pragmatismo, no ideología«; concluyó el líder torie en la rueda de prensa en la que anunció la reversión de medidas.
«Un hombre es una hombre y una mujer es una mujer»
Ese giro se ha confirmado esta semana en el discurso de clausura de la Conferencia del Partido Conservador. En la misma línea que la ministra de Interior, Suella Braverman, que anunció el martes que el país impulsará una legislación para impedir a los delincuentes realizarse un cambio de sexo registral —una medida que desde la izquierda se ha considerado «transfoba»—, Sunak ha pedido «no dejarse intimidar» por quienes quieren «hacernos creer que las personas pueden ser del sexo que quieran».
«No debería ser controvertido que los padres sepan lo que les enseñan a sus hijos en los colegios sobre las relaciones. Los pacientes deben saber cuándo en los hospitales se habla de hombres o de mujeres. No deberían atacarnos por eso. No deberíamos dejarnos intimidar por quienes quieren hacernos creer que las personas pueden ser del sexo que quieran. No pueden. Un hombre es un hombre y una mujer es una mujer, eso es simplemente sentido común», aseguró este miércoles el primer ministro…