Por Mayda Saborit.
Nos traicionaste…, pero será la ultima vez.
Cuando hablé un día antes de las “elecciones” de uno de nuestros más ilustres Judas Iscariote, haciendo referencia a la campaña del quintacolumnista Carlos Alberto Montaner al servicio de los enemigos de América, me quedaba chiquita… Porque este hombre es un piojo al lado de los zorros vividores que se han hecho “políticos” a costilla de nuestro amor por América, a costilla de nuestro voto…, el voto que le dimos y le requetedimos los cubanos americanos en favor de defender las bases de la democracia y la libertad que vinimos buscando a este país, el voto que le repetimos en favor de apoyar a nuestro presidente Donald Trump, y a una América acechada por esa secta globalista-comunista que intenta destruir esta nación que acogió un día a sus progenitores, incluso a ellos… y les dio las oportunidades que en Cuba de haber nacido o crecido allí, jamás hubieran tenido.
Hay algo muy bueno, entre todas las cosas maravillosas que ha hecho la administración Trump, y eso ha sido sacarle la verdadera cara a la gente… Y sobre todo ahora que han saltado como ratas estos traidores hacia el otro barco, creyendo que el nuestro se estaba hundiendo en el pantano encarroñado, infectado por la podredumbre de la que ellos mismos son parte.
Las aguas están tomando su nivel, el pantano será drenado, junto con ellos por supuesto….
Pero esta puñalada por la espalda que el “Senador” Marco Rubio nos dio a los cubanos americanos que un día lo pusimos allí, nunca será olvidada.
Nos traicionaste, Marco Rubio, Pero será la última vez. En lo que a nosotros respecta, no tendrás nunca más nuestro voto.
Por una América camino a la justicia, a la verdad y a la transparencia electoral, por el drenaje del pantano, por limpiar nuestras comunidades de falsos representantes.
Mayda Saborit escritora y artista.
Ya se va haciendo costumbre en esta rata que le importa más Venezuela que los propios cubanos, a mi en lo particular no me engañó, desde que lo vi tirándole a los cubanos y defendiendo a los venezolanos. A este se le olvidó que fue puesto ahí por nuestro voto y que además somos quienes le pagamos su gran salario, SÍ, el pueblo contribuyente, espero y confío en Dios que pronto lo quiten nuestro voto más para él, que sude la camisa trabajando como la sudamos los que le dimos el voto y de pasó pagamos su buen salario, he dicho!