Por Paula Benito/OKDiario.
Armita Geravand, la menor iraní que recibió una paliza en el metro de Teherán por no llevar el velo islámico, ha muerto este sábado. La joven de 16 años llevaba 28 días en coma.
Las autoridades iraníes, al igual que ocurrió con Mahsa Amini, aseguran que Armita Geravand sufrió una bajada de tensión en el metro y al caer se golpeó la cabeza, pero grupos de derechos humanos han denunciado que fue agredida por no cubrirse con el velo.
Los medios iraníes difundieron imágenes de las cámaras de seguridad en las que se ve a varias personas sacar a la joven del vagón tras la supuesta bajada de tensión, pero no hay rastro de lo que ocurrió antes de esto. Por ello, ONG como Iran Human Rights (IHR) sospechan que fue agredida por miembros de la Policía de la Moral.
Por su parte, Amnistía Internacional, ha afirmado que el vídeo ha sido manipulado con la aceleración de fotogramas en cuatro secciones y hay lapsos de más de tres minutos en la grabación hecha pública. La organización kurda de derechos humanos Hengaw también ha denunciado que la joven fue agredida por no llevar el velo.