Por Esteban Álvarez-Buylla.
Mi naturaleza tiene sonidos de patines de hierro sobre la acera, tiene el tacto de canicas medio partidas y de sacudirse boronillas de torticas. Mi naturaleza es la lluvia antes de la escuela, la hierba chapeada de la iglesia y los guisazos en las medias. Mi naturaleza es un pitico en el pecho y desgano por la comida y la pelota de trapo botando el bolsillo. Mi naturaleza es encenderle el cigarro a la abuela con la hornilla bajita, el trago de ron escondido con mi hermano el negro Carlos que también me deja darle una patá al cigarro mirando p’a los la’os. Mi naturaleza es esperar que Roxana cruce las piernas y las descruce, agarrar por la cintura a Ada “ya, que se lo digo a la maestra” pero ahí se queda sonriendo y esperando la otra agarrá. Mi naturaleza es chama no me molestes no me he metido contigo y luego despingarlo, mi pantaloncito apreta’o que ya ni me sirve y el odio por esos zapatos cheos. Mi naturaleza es velar que pase la cajera de la peluquería y decirle que se pare…”niño tu tas loco, si mi marido te ve se arma” y me sonríe más calentona que mi cráneo. Mi naturaleza es no voto p’al azúcar p’a Chile ni Vietnam, oír La Voz De Las Américas y Beaker Street KAAY the underground music service Little Rock. Mi naturaleza es pintar muñequitos de cuna, pistolitas de palo y correítas de reloj e invitar a los amigos al Conejito. Mi naturaleza es que se me rompa arriba mi pulóver favorito y conocerte y enamorarte antes que el pulóver no de más, hacernos novios sentados en el cantero de la ceiba que después prefirió irse con nosotros a donde estemos. Mi naturaleza es ser infaliblemente fiel hasta que la vi, con su ropita modesta, sus sandalias y su cartera, con ojos tan negros como su pelo y labios rojísimos. Mi naturaleza es buscarte y buscarte, olerte en la distancia, oírte y verte acercar con un salto en el pecho, atraparte en los sueños y en algún día mágico menos pensado.
Esteban Álvarez-Buylla pintor y escritor.
Maestro AB, sl leer su poema desenpolve recuerdos llenos olores y colores tan vívidos como si fuera ayer a pesar de que vienen de varias décadas! Exelrnte modo de llevar a cada cubano de su época a rememorar du vida temprana en esa tierra hermosa que hoy sufre y que llevamos clavada en rl alma y el corazón.
Me gusto mucho. Especialmente la pintura de la pareja.
Mientras leía este poema, seguía una película muy cercana a una historia conocida. Adaptaba esos pequeños momentos a mis aventuras de aquel país y tiempo que ya no es, ni serà. Me tomé esos guisazos muy personal y en un momento hasta recorrí todos aquellos inolvidables momentos que llegaron continuamente a las 4:20pm. Chama!! En breve tiempo recordé con cariño e intriga muchos personajes de mi niñez en los que no he pensado en largo tiempo.
Te felicito este magnífico poema y esas pinturas que también me llevan a pasear en otra historia que puedo tocar y sentir fácilmente. Esa pintura de la dama en rojo se fue por encima del nivel.
Sumamente hermoso y nostálgico! Se adapta a todos los q hemos dejado atrás tantas cosas… Bello ! Me encantó leerte! Como siempre’
Creo que nunca he sido envidioso pero, hermano, “envidio” tanto tu talento!!
Tu poema es como tu pintura: coloridas pinceladas de “expresionismo criollo” (recuerda que fui yo quien acuñó ese término) que me transportan a mis años de infancia, adolescencia y primera juventud. Tu naturaleza es mi naturaleza, y esa capacidad de hacer que el observador de tu pintura o lector de tu poema se sienta identificado, es una de tus virtudes como artista.
Has tomado mi mano y me has paseado poe mi juventud. Gracias.
Lindo. Gracias. Fuerte el abrazo.
Tengo que reconocer que no solo me gustan tus pinturas, sino que escribes genial también. Un placer de tenerte como amigo y colega de trabajo. Nada mas gratificante que ser bueno en lo que te gusta. Saludos
Buenísimo me encanta
Estará ella pensando en su naturaleza?
Buen escrito.