Por Luant.
Le llamaban «Pedro el Guapo»
su ejército de adulones,
enchufados y gorrones
que endiosaban a su capo…
Mírenlo hoy; es un trapo,
parece una ajada palma
que dobla el miedo, sin calma,
con la corrupción por tara…
Está claro que la cara
¡es el reflejo del alma!
***
***
Luant es pintor, caricaturista, decimista, bongosero. Colaborador de SevillaInfo y de ZoePost. Autor del libro Luant cara a cara.