Por Félix Antonio Rojas.
Dicen que el homosexual de la matanza de Texas, cometió los homicidios por despecho, desazón y resentimiento, eso es lo que da jugar a las muñecas, la promiscuidad, el sexo duro por atrás y la pegadera de tarros…
En mis tiempos de jovenzuelo allá por los 70tas, la mayoría de los homosexuales cuando cogían a su bugarrón clavando a otro pato del barrio, se cortaban la cara a navajazos, se prendían fuego con luz brillante, se tiraban brujería las 24 horas del día, se ripiaban los dos o tres blúmer viejos que tenían escondidos entre los calzoncillos, se envenenaban con tinta para limpiar zapatos, se cortaban las venas y esas tallas de homosexuales trágicos… pero últimamente, los gay se han vuelto muy violentos, vehementes e impredecibles, principalmente cuando coincide la época de aparearse con los solsticios de verano, todo debido lógicamente al irreversible cambio climático
Nunca pero nunca en la vida le den una pistola al Brontaroc.
Félix Antonio Rojas es friki freelancer.
Muy real también de mis tiempos (los 50-60)