Por Redacción ZoePost.
El primer ministro de Francia, Jean Castex anunció que las Navidades y las fiestas cercanas occidentales cristianas está en veremos, y que no son para nada razonables en el momento en que se encuentra el país enfrentando un segundo confinamiento, que harán todo lo posible para que en caso de celebrarse sucedan en “pequeños comités”, que es una frase muy común para definir a los pequeños grupos, pero que a los cubanos le traen malos recuerdos.
Es necesario subrayar que en medio del primer confinamiento ocurrió sin ningún tipo de problemas el Ramadán musulmán, que ocurre durante un mes y cuya celebración ocurre cada noche, a modo familiar, para degustar los alimentos que no se han podido comer antes de la caída del sol. Normalmente las comelatas opíparas del Ramadán duran hasta muy tarde en la madrugada, entre grupos de amigos y familiares.
A los exiliados cubanos la prohibición de fiestas navideñas también les recuerda duros períodos de las prohibiciones en ls isla del Dr. Castro por parte del castrocomunismo y sus consecuencias que duran hasta hoy debido al imperativo de la escasez.