Por Dámaso Barraza.
Parecería una telenovela, una serie de Netflix o un chisme que se sigue por las redes sociales cuando se especula sobre las motivaciones que han llevado a Trump a librar su revolución por la independencia de los Estados Unidos. Queda claro que muchas de estas motivaciones son políticas y económicas —las más evidentes—, aunque en el horizonte, quizá más discretamente, están aquellas de índole religiosa, escondidas bajo capas de retórica política y económica. La influencia de la religión en la economía y la política es un tema complejo y debatido. Históricamente, las ideas religiosas han desempeñado un papel significativo en la configuración de sistemas económicos y políticos, y continúan haciéndolo en muchas partes del mundo. Y Donald Trump no sería una excepción.
En el caso de las políticas de Donald Trump, las vemos entrelazadas con un fuerte sentido de nacionalismo cristiano[1], donde Estados Unidos se percibe como una nación elegida por designio divino. Su alianza con líderes evangélicos influyentes ha sido clave para movilizar el voto y consolidar su apoyo, enmarcando muchos debates políticos como una «guerra cultural» entre valores cristianos tradicionales y fuerzas seculares.
Pero no es suficiente para enmarcar a Trump en una iglesia específica[2], algo que lo convierte en objeto de debate. Si bien algunos críticos cuestionan la sinceridad de sus creencias, otros argumentan que la retórica religiosa es una de sus estrategias políticas para obtener apoyo. La influencia de estas motivaciones se refleja en políticas concretas, como el nombramiento de jueces conservadores y la promoción de valores tradicionales, generando una polarización política significativa.
En un mundo donde la secularización y el materialismo práctico son los marcos en los que se desarrollan las propuestas políticas y económicas, podría parecer extraño que la religión proporcione marcos morales que influyen en las decisiones económicas y políticas. Conceptos como la justicia, la equidad, la compasión y la responsabilidad social pueden derivarse de enseñanzas religiosas y guiar las políticas públicas. Y desde ahí, desde la religión, parece ser que muchas de las decisiones de Trump vienen fundamentadas.
La formación de Donald Trump estuvo marcada por una educación presbiteriana, la ética de trabajo implacable inculcada por su padre, Fred Trump, y los valores cristianos tradicionales transmitidos por su madre, Mary Trump. Por un lado, la idea de que la vida es una competencia feroz donde solo los más implacables sobreviven. Esta filosofía se tradujo en una dedicación extrema al trabajo, llevando a sus hijos a los sitios de construcción incluso los domingos. Por otro lado, la familia asistía a la iglesia en Jamaica, Queens, y Donald Trump incluso publicó con orgullo su foto de confirmación, buscando proyectar una imagen de fe cristiana. Esta combinación de influencias —la ética de trabajo implacable y los valores cristianos tradicionales— moldeó la personalidad y la visión del mundo de Donald Trump. Si bien la ética de trabajo pudo haber contribuido a su ambición y determinación, los valores cristianos pudieron haber influido en su visión de la moralidad y su conexión con ciertos sectores del electorado[3].
La educación religiosa de Donald Trump sería insignificante si no tuviéramos conocimiento del significado de la educación presbiteriana, que tiene que ver con la doctrina calvinista. Por cierto, en la revista de orientación de derecha sueca Contra, en su número 4 del 2024, aparece justamente un artículo titulado Kapitalismen och protestantismen (Capitalismo y Protestantismo)[4], y bajo la autoría de Britt-Louise Hoberg, se subraya la influencia que ha tenido justamente la doctrina calvinista en la conformación del capitalismo moderno.
Un poco nos puede acercar al pensamiento de Donald Trump cuando leemos que el capitalismo moderno recibió una influencia significativa de la cultura calvinista a través de varios mecanismos clave. Se destaca la migración de un gran número de refugiados protestantes, específicamente calvinistas (como los hugonotes franceses y los valones), hacia países como Inglaterra. Estos grupos no solo huían de la persecución religiosa, sino que traían consigo habilidades cruciales, capital de riesgo, una fuerte ética de trabajo (y aquí se mencionan los escritos del sociólogo, economista, jurista, historiador y politólogo alemán Max Weber), y un espíritu innovador y emprendedor que fueron fundamentales para impulsar la Revolución Industrial. Su llegada representó una inyección de «capital humano» con una mentalidad propicia para el desarrollo capitalista tal como lo conocemos hoy.
La cosmovisión calvinista, asegura Britt-Louise Hoberg, era más compatible con el naciente espíritu capitalista que otras tradiciones, como la católica predominante en España o Alemania en ese momento. Se menciona que los calvinistas tenían una visión «más individualista» de la fe, lo cual parece haber encajado mejor con la toma de riesgos, la inversión y la acumulación inherentes al capitalismo. Los «valores cristianos» de estos calvinistas convertidos en innovadores, comerciantes y capitalistas de riesgo fueron pilares fundamentales. Así, factores favorables a la invención, protección de patentes y estabilidad política en Inglaterra permitieron que esta cultura económica floreciera, ejemplificado en la fundación del Banco de Inglaterra[5] o figuras como Thomas Newcomen.
Mirando a Donald Trump desde esta perspectiva se nos habla tanto de que él está haciendo, porque son en gran medida sustentadas por su educación religiosa. Esta, arraigada en la tradición presbiteriana, revela una perspectiva valiosa para comprender la acción política y económica de Donald Trump. Es fácil reconocer en Donald Trump la ética protestante calvinista del trabajo, que valora la eficiencia y el pragmatismo. Su visión de la vida como una competencia entre ganadores y perdedores, arraigada en su educación, se manifiesta en su actitud hacia la burocracia, percibida como un obstáculo para el éxito individual y la eficiencia.
Dámaso Barraza es un opositor cubano radicado en Suecia.
[1] ¿Qué es el nacionalismo cristiano? (s/f). Gotquestions.org Español. Recuperado el 14 de abril de 2025, de https://www.gotquestions.org/Espanol/Nacionalismo-cristiano.html
[2] Silliman, D. (2024, December 1). Trump es el primer presidente que cambia de denominación durante su cargo desde Eisenhower. Christianity Today en español | Cristianismo hoy. https://es.christianitytoday.com/2024/12/trump-cambio-de-fe-presbiteriano-no-denominacional-evangelio-prosperidad-es/
[3] Burke, D. (2016, October 24). ¿Cuáles son las creencias religiosas de Donald Trump? CNN en Español. https://cnnespanol.cnn.com/2016/10/24/cuales-son-las-creencias-religiosas-de-donald-trump
[4] Hoberg, B.-L. (2025, February 24). Kapitalismen och protestantismen. Contra 4/2024, 3.
[5] (S/f). Avatrade.es. Recuperado el 14 de abril de 2025, de https://www.avatrade.es/educacion/indicadores-economicos/banco-de-inglaterra
