Por Julia Nieto.
Imagino la factura y la fractura personal y política que ha obligado a Isabel a dar la rueda de prensa de hoy.
Tras esta ruptura consumada, el panorama es atroz.
El PP es mi casa política por naturaleza. Fui militante de joven, pero dejé de serlo cuando consideré que mi independencia y libertad no están al servicio de nadie.
Por ello, sería la primera en considerar a Isabel una decepción (otra más) si se probara que las acusaciones que vierte Génova contra ella están probadas.
Pero no nos engañemos. El que acusa, prueba.
Nunca el acusado, inocente hasta que se pruebe lo contrario.
El órdago de Isabel sobre su honradez es correcto.
Probadlo. No inventéis, no especuléis, no fabriquéis, no enredéis.
La verdadera cuestión no es el supuesto pago, sino una forma de hacer política exitosa, realmente popular en su doble sentido, como partido y como cercana a la gente.
Y eso no se soporta en Génova.
Una política sincera, con sus luces y sombras.
Una gestión sin complejos.
No entiendo la ceguera culpable de quienes NO QUIEREN ver que el partido es imparable cuando se gobierna con sus principios.
No entiendo el compadreo, la compra de mantras y el servilismo a lo felpudo de Génova frente al dantesco gobierno que padecemos.
Su falta de dureza.
Su interés por el carguito al precio que sea.
Si ella se va, se perderá una ocasión única de acabar con el socialcomunismo.
Si ella abandona el partido, nunca les volveré a votar.
Si Isabel y Cayetana se animan a formar algo, contarán con mi voto.
Julia Nieto es Profesora de Historia y Filosofía en ESO y Bachillerato.
Ojala se animen. Gracias