Por Vozpópuli.
El consumo de series surcoreanas es visto como una amenaza existencial para el régimen de Kim Jong-un, que responde con ejecuciones públicas y otros castigos extremos que no logran frenar el impacto cultural creciente del país vecino entre los jóvenes norcoreanos, según testimonios presentados por desertores este miércoles en Seúl.
Esta semana, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR) en Seúl comenzó un foro público, de dos días, con desertores norcoreanos, que han sido víctimas y testigos de violaciones de DD.HH, para documentar los últimos diez años de abusos del régimen de Kim Jong-un. El evento forma parte de los trabajos preparatorios para un informe especial que será presentado en septiembre ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU…